STROMBOLI es una pequeña isla italiana en el mar Tirreno, cuya principal característica es la de ser la cima emergida del volcán activo homónimo. Su nombre es una corrupción del antiguo nombre griego Στρογγυλή (Stroŋgulḗ) que se le dio por su forma redonda y abombada.(1).
Esa, es una realidad terrenal y absoluta que envuelve varios mitos y leyendas...
Roberto Rosellini, un mito del cine italiano, destacado director, productor y guionista, del neorrealismo italiano, en 1950 escoge la isla para su película “Stromboli terra di Dio”, para la que escoge a otro mito del cine de la época: Ingrid Bergman. Durante el rodaje el volcán entró en erupción y muchas de las escenas son reales. La película dio mucho que hablar no solo por la erupción del volcán, sino por las pasiones que estallaron entre Rosellini e Bergman durante la filmación.
Cuenta la leyenda que no fue el volcán, sino ese estallido de amor de película , el que en los años 50, dio el origen al nombre de una especie de empanadilla ítalo-americana, primo-hermano del calzone y de parentela cercana, no definida, con la pizza, debido a que las 3 usan misma masa con diferentes técnicas y formas.
Algunos dicen que nació en Filadelfia, cuando un cocinero italiano comparó el volcán con el relleno de su panecillo de masa de piza, otros dicen que fue en Washington y unos más afirman que en New York. No sabemos con certeza quién tuvo la primera idea pero todas coinciden en una conocida realidad de inmigrantes italianos fusionando sus tradiciones e innovando la gastronomia norteamericana.
Hoy, en Montevideo, ZOÍ toma todas esas leyendas, las funde de manera delicada y respetuosa, con rellenos tan tradicionales como queso, tomate y albahaca, un poco más osados como el de morrón, panceta y queso, o su inclusiva opción de espinaca, ricota y nuez en masa integral. Acercate a probarlos , es una experiencia de que dará realidad a la delicia de tu historia gastronómica.
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